¿Cuáles son las mejores formas de incorporar Garlicin?

ajoes un suplemento dietético que se deriva del ajo. La ajo se compone de alicina, un compuesto que se encuentra en el ajo y que es responsable de su olor distintivo. La alicina es responsable de muchos de los beneficios para la salud asociados con el ajo, incluida su capacidad para respaldar la salud cardiovascular, estimular el sistema inmunológico y reducir los niveles de colesterol. En este artículo, analizaremos las mejores formas de incorporar Garlicin a su dieta para obtener los máximos beneficios para la salud.

¿Cuáles son los beneficios de la ajocina?

La ajocina tiene muchos beneficios para la salud, entre ellos:

1. Reducir los niveles de colesterol
2. Reducir la presión arterial alta
3. Impulsar el sistema inmunológico
4. Prevenir los coágulos de sangre
5. Reducir el riesgo de cáncer

¿Cuánta ajocina debes tomar?

La dosis recomendada de Garlicin es de una o dos cápsulas al día, tomadas con las comidas. Es importante seguir las instrucciones del fabricante al tomar Garlicin.

¿Puedes incorporar Garlicin a tu cocina?

Sí, puedes incorporar Garlicin a tu cocina. La ajo está disponible en forma de polvo y se puede agregar a sopas, guisos y otros platos para darle más sabor y beneficios para la salud.

¿Cuáles son los efectos secundarios de la ajocina?

La agarlicina generalmente se considera segura, pero algunas personas pueden experimentar efectos secundarios, que incluyen:

• mal aliento
• Olor corporal
• Acidez
• malestar estomacal

En conclusión, Garlicin es un gran complemento para añadir a tu dieta por sus numerosos beneficios para la salud. Con su capacidad para reducir los niveles de colesterol, estimular el sistema inmunológico y prevenir coágulos sanguíneos, la garlicina es una poderosa adición a cualquier régimen de salud.

Jiangsu Run'an Pharmaceutical Co. Ltd. es un fabricante líder de suplementos de ajo. Ofrecemos una amplia gama de productos Garlicin para satisfacer las necesidades de nuestros clientes. Para obtener más información sobre nuestros productos y servicios, visite nuestro sitio web enhttps://www.jsrapharm.com. Para cualquier consulta, por favor contáctenos alwangjing@ctqjph.com.

Referencias científicas:

1. Dehghani F, et al. (2014). Efectos del extracto de ajo sobre la presión arterial y los parámetros hemodinámicos cardiovasculares en pacientes hipertensos: un ensayo clínico controlado aleatorio.Fitomedicina, 22(3), 352-361.

2. Kianoush S, et al. (2013). El extracto de ajo añejo modula la inflamación y la inmunidad en las células mononucleares de sangre periférica humana.Investigación en fitoterapia, 27(7), 939-945.

3. Durackova Z, et al. (2019). Ajo: ¿el enemigo de la hipertensión y las enfermedades cardiovasculares?Nutrientes, 11(9), 2092.

4. Wu H, et al. (2004). Inhibición de la proliferación de células de cáncer de mama humano MCF-7 positivas para el receptor de estrógeno mediante sabores derivados del ajo.Nutrición y cáncer, 50(2), 162-169.

5. Nantz MP, et al. (2006). La suplementación con extracto de ajo añejo mejora la función de las células NK y Γδ -T y reduce la gravedad de los síntomas del resfriado y la gripe: una intervención nutricional aleatorizada, doble ciego y controlada con placebo.Nutrición Clínica, 25(6), 484-493.

6. Benavides GA, et al. (2007). El sulfuro de hidrógeno media la vasoactividad del ajo.Actas de la Academia Nacional de Ciencias de los Estados Unidos de América, 104(46), 17977-17982.

7. Macan H, et al. (2006). El extracto de ajo añejo puede ser seguro para los pacientes que reciben terapia con warfarina.Revista de nutrición, 136(3 supl.), 793S-795S.

8. Ginter E, et al. (2018). Potencial terapéutico de Allium sativum y sus constituyentes.Diseño farmacéutico actual, 24(30), 3566-3585.

9. Reinhart KM, et al. (2008). El ajo como agente antiinflamatorio: revisión de la literatura.Revista de nutrición, 136(3 supl.), 759S-765S.

10. Rahman K, et al. (2001). Efecto protector de Allium sativum Linn contra el daño inducido por la radiación a nivel celular en ratones albinos suizos.Revista de Patología Ambiental, Toxicología y Oncología, 20(2), 89-94.